MACEROS

Los maceros son unos funcionarios públicos con categoría superior a la de ordenanza, completamente anacrónicos y desfasados en los tiempos que corren.

Su misión consiste en  hacer acto de presencia en determinados actos oficiales y acompañar comitivas oficiales y notorias.

Se trata de dar realce e importancia a dichos actos, a la vez que color y oficialidad añeja.

Su uniforme consiste el un tabardo (léase poncho) generalmente con el escudo de la administración a representar, ya sea en las cortes el escudo de España , ya en cualquier ayuntamiento o comunidad,  el escudo propio de aquellos.

Maza de plata (léase plateada) que es precisamente eso, una maza, y sombrero de terciopelo con pluma (en el sentido literal, no figurado, de la palabra).

De esta guisa, se supone que realzan los actos y comitivas, cuando en la mitad de los casos solo llegan a provocar la sonrisa de los jóvenes y la resignación leal de los mayores.

Pero bueno, hay cosas que se resisten a desaparecer o a cambiar en este país, y no precisamente  las que más pueden interesar a los ciudadanos, así que tendremos maceros para rato.

 



¿DÓNDE ESTÁ URDARGARIN?

 

En su casa.

Después de ser condenado a 6 años de prisión y multa de 500.000 €, como ya suponíamos, no ha cumplido ni lo uno ni lo otro.

El auto de medidas cautelares bla, bla, y bla,  determinó que no ingrese en prisión, que no se le retire el pasaporte y que no pague los 200.000 € de fianza.

Que siga en Suiza y que se presente ante un juez suizo el día 1 de cada mes.

Suiza no pertenece a la Unión Europea, ni tiene ningún convenio legal con España, así que tampoco es legal esta medida de favoritismo para un delincuente.

Pero este es el privilegio de ser estafador real, que puedes cometer cualquier delito que no te pasa na de na.

Tienes que pasar por el teatrillo del juicio, pero nada más. Lo que te salga es papel mojao, luego se te aplica el descuento real a ti y a tu esposa y los dos a la calle.

Cualquier otro sin privilegios reales estaría ahora en Alcalá Meco o en el Puerto Dos desde el primer minuto de su inculpación.

Pero para esta chusma el cumplimiento de la ley y el respeto a la justicia es para los plebeyos.

Para mi próxima vida me pido algo real (de rey no de Bárbara).

NOTARIOS

Los notarios son unos señores que tienen una pluma muy cara.
Solo  tienen que aprobar una oposición, que será todo lo difícil que se quiera, pero eso les da derecho a no dar nunca más en su vida palo al agua.
Nos cobran cantidades desorbitantes por firmar documentos que les hacen otros (sus pasantes) y ellos solo lo tienen que firmar con su pluma cara, nada más. Ni si quiera se lo leen, por lo que la mayoría de las veces están llenos de faltas,  errores de concepto, repartos de herencias incorrectos e incluso de impertinencias (y se lo digo por experiencia, pues se empeñaban en nombrar "La Nieves" a mi esposa en una escritura de herencia que no fui capaz de hacerles corregir).
Su pregunta preferida es: ¿Les hace falta que les lea todo el documento?.
Si la respuesta es no, lo firman sin despeinarse y tu te pasas por caja como un guilipollas.
Si la respuesta es si, lo leen con la mayor desgana e insolencia y tu te pasas por caja pero, con la satisfacción de haberles hecho al menos leer lo que firman.
Pobre venganza, pero no se puede hacer nada más así que a sufrirlos con resignación como a los mosquitos en verano.

ESTIBADORES: ARISTOCRATAS EN MONO

Nadie sabe lo que son los estibadores en este país, ni cual es su trabajo ni su estatus, pero todos hablan de ellos.
Los periodistas han hecho su agosto y han vertido ríos de tinta escribiendo y opinando. Han llenado los periódicos durante diez días con este tema sin tener la menor idea de lo que son estos individuos realmente ni cual es su estatus ni su modus vivendi.
Los políticos han tenido que recurrir a sus asesores (que es lo mismo que recurrir a un poste de teléfonos) y estos al diccionario, pero siguen igual. Sin saber nada de nada, aunque hablando y haciendo y derogando decretos etc... como solo un político puede hacer sin el menor pudor.
Nos han querido vender la moto de que Europa es muy mala y persigue a unos pobres trabajadores españoles imponiéndonos multas y otras tropelías, pero aquí están ellos para pagarlas con el dinero de los que no somos estibadores, para que ellos sigan manteniendo su estatus.
Lo que pasa es que yo, y muchos como yo, si sabemos lo que son los estibadores. Nos hemos visto obligados a contratarlos en los puertos españoles aunque no nos hiciesen ninguna falta sus servicios.
Los estibadores forman una mafia completamente aislada del resto de trabajadores de esta país con los que no son en absoluto solidarios. Viven protegidos, dentro del estado, por unas leyes propias que los hace invulnerables, y cobrando unos sueldos de autentico lujo que le sacan a los armadores y en definitiva a los marinos mercantes. Pero, ¿como se hace uno estibador?.
1.- Son cargos dinásticos y hereditarios, para entrar en esta mafia no hace falta ningún estudio ni oposición. Se entra directamente a dedo, pero solo siendo hijo de un estibador. O sea una mafia cerrada que no permite la igualdad de oportunidades en la contratación del trabajador, vulnerando cualquier derecho nacional e internacional.
2.- Sus sueldos están garantizados de por vida, pues sus leyes, consentidas a la fuerza por las autoridades portuarias, obligan a los buque a contratarlos, le hagan falta o no, y además en el número que ellos determinen. Normalmente como no hacen en absoluto falta para nada a bordo, se dedican a pescar desde el costado del buque.
3.- Como son tantos y no habría trabajo para todos si fueran contratados por la ley de la oferta y la demanda, trabajan por turnos, o sea que van al puerto una semana al mes.
4.- Como es muy molesto para ellos tener que acudir a su trabajo, contratan a algún esclavo para que vaya por ellos durante esa semana y les pagan, pues el dinero no es un problema para ellos.
5.- Como ejemplo de sus sueldos tenemos la oferta que les hizo el gobierno para que dejasen la huelga: Retiros cobrando 3000 euros al mes durante toda su vida. Y lo rechazaron.
Normal, pues perdían: Primero poder adquisitivo, pues cobran mucho más, y luego el derecho sucesorio de trabajo indefinido para sus hijos.
Las dos Españas, pero ojo, estos van de mono por la vida, para que no se les pueda tachar de señoritos. Son obreros, unos pobres trabajadores a los que Europa quiere despojar de privilegios, pero eso sí, aristócratas consentidos y altivos.

AFORADOS

Jueces corruptos (o sea jueces), porteros de discoteca, proxenetas, rateros o aforados.
Si pudieras eliminar a un colectivo, suprimirlo de la faz de la tierra, que no se pudieran repetir nunca. ¿A cual elegirías?...


CORRECTO

FUMADORES (de terrazas)

Los fumadores estaban revestidos de un halo de impunidad. Podían hacernos tragar su humo en los locales cerrados, incluso públicos, sin que tuviéramos derecho a protestar. Era parte de las reglas del juego e incluso tenían prioridad sobre cualquier molesto no fumador que los increpase.

El fumador era el amo y no había más que hablar.

Su chulería, solo equiparable a la de un verdugo Saudí de espada, no admitía réplica, pues estaba apoyado por  los amos de los comercios y los jefes de departamentos de los estamentos públicos, así que había que aguantar la humareda sin rechistar.

Pero  en el 2006 apareció la Ley Antitabaco, a la que empezó a hacérsele caso a regañadientes, por lo que se enmendó en el 2011.

Los fumadores ya no podían fumar en los lugares públicos. Desaparecía el placer de hacerlo en el metro, o en el restaurante, y ya no se podía  molestar a esos sosos no fumadores.

Tenían que hacer algo, pues si  había una ley, también habría una trampa ¿No?.

Se pusieron a pensar y al final idearon algo para seguir molestando a los nofu . Si no se podía fumar en el metro, al menos se les ahumaría cuando más molesta: En los restaurantes, y así aparecieron las terrazas-trampa.

La ley antitabaco del 2011 había reformado el texto de la del 2006 quedando así:

2. A efectos de esta Ley, en el ámbito de la hostelería, se entiende por espacio al aire libre todo espacio no cubierto o todo espacio que estando cubierto esté rodeado lateralmente por un máximo de dos paredes, muros o paramentos.

O sea que para que  una terraza cerrada se pueda considerar como espacio abierto, (y se pueda fumar en ella) tiene que tener como máximo un techo y dos paredes.

Pero ¿Qué pasa cuando llega el invierno?. Falta al menos otra pared, para no pasar frío y seguir ahumando a los molestos nofu.

Problema resuelto: Las paredes correderas o plegables, que se cierran cuando no se dan cuenta los no fumadores.

Bueno lo que quiero decir es que comer en una terraza así es francamente desagradable. Estar tragándote el humo de un montón de chimeneas humanas (fuera de la ley) mientras comes es una pesadilla.

Y permítanme que les diga que creo firmemente que ha aparecido la profesión de fumador profesional. El cual es contratado por el restaurante de la competencia para que fume en la terraza ajena, a ser posible un puro pestilente, y así se las vacíe de comensales.

EXPERTOS y ASESORES

Están de moda los expertos.
En realidad un experto en algo es alguien que cree que sabe mucho de ese algo. Aunque no es necesario que sepa absolutamente nada.
Como no hay programas de estudio, ni oposiciones, ni titulación pertinente, ser experto es bastante fácil, basta con decir que uno lo es y ya está. Nadie lo puede comprobar ni rebatir y ni siquiera refutar, todo lo más cabrearse interiormente.
Si a eso le añadimos una pose autosuficiente, una voz ahuecada y una cierta palabrería, el experto está listo para empezar a cobrar, si es posible mejor de la administración.
Tampoco está de más que algún amigo o familiar situado le den el espaldarazo y entonces su asentamiento como experto sería ya completamente irrebatible.
El grado más alto para un experto es el de asesor, que es lo mismo, pero cuando ese amigo, familiar o encargado lo contrata pagando su nómina la administración, o sea nosotros.
Para mi próxima vida me pido experto español asesor de políticos domésticos, o sea alcaldes. ¿Puedo?. Creo que no, pues se me olvidaba la principal condición que debe reunir: Tener la cara tan dura como el cemento. Con ese toque de insolencia que solo da la ignorancia supina.

ORDENADORES DESESPERANTES

Los ordenadores están tomando las riendas, ya no son esas cajas tontas y obedientes que eran al principio, ahora son inteligentes y piensan por nosotros.
Su mayor preocupación es que no nos equivoquemos, que no tomemos decisiones incorrectas e irrecuperables, así que nos previenen, preguntan y aconsejan por nuestro bien.
Lo malo es que han pasado de ser educados consejeros a pesados y repetitivos fiscales y finalmente se han convertido en  descarados y desobedientes amos que van por libre, y con la escusa de evitarnos errores no  hacen caso de nuestras ordenes  y nos desobedecen insolentemente.
Los diálogos que se establecen entre el amo del ordenador y su software inteligente son los siguientes:


Soft- ¿Quiere abrir o comprobar  la unidad D?.
Amo- Abrirla.


Soft- ¿Está seguro que quiere cerrar la aplicación?
Amo- Si.


Soft- No tiene permiso del administrador para ejecutar esa orden.
Amo- Si  lo tengo porque el ordenador es mío.


Soft- No se puede abrir el archivo porque esta siendo usado por otro usuario.
Amo- Estoy yo solo.



Soft- No tiene conexión a internet. ¿Quiere que el sistema se conecte?.
Amo- No, no quiero.

Soft- Reciclando.............
Amo - Si no reciclo el papel tío.....

Y un largo etcétera que nos quita tiempo y autoridad. Es el síndrome de la chacha con el bachiller.
A ver como son de insolentes y déspotas los de la siguiente generación.... Temiéndoles estoy.

HOMO CICLISTA

En una época anterior, concretamente en el siglo pasado, cada pueblo tenía su propio ciclista, que era un solo señor y montaba en una bici de carreras, por lo que era idolatrado por la chavalería y distinguido por sus paisanos.
Con el crecimiento demográfico fueron también apareciendo más y más ciclistas, incluso agrupaciones ciclistas, diferentes tipos de bicicletas etc. hasta que el ciclista dejó de ser idolatrado por los chavales e ignorado por las gente corriente del pueblo.
Pero el ciclista siempre ha tenido unas gotas de prepotencia en su sangre y unos aminoácidos de soberbia en su ADN y ahora por la puñetera masificación y los carriles bici se había convertido en un ser invisible.
Tenían que hacer algo para destacar como antes y sacaron estas normas, no escritas, pero si seguidas por todos.
Los cinco mandamientos del ciclista:
1. Cuando se vaya en grupo por la carretera, por muy estrecha que esta sea, jamás ir en fila. Se va en pelotón, y si los coches no pueden adelantar que se esperen.
2. No usar nunca el carril bici por muy cerca que esté y muy accesible que sea. Eso os convertiría en meros borregos. El carril bici es para jubilados, pordioseros de dos ruedas sin equipamiento a la moda, para los que llevan bicicletas del verano azul,  y ese tipo de gente sin clase.
3. Jamás os bajéis para cruzar un paso de cebra. Que se pare el tráfico que es menos necesario que nosotros.
4. Cuando vayáis por zonas peatonales hacedlo a toda velocidad, a ser posible apuntar a los peatones y esquivarlos en el último momento, haced quiebros, que nunca se imaginen vuestro próximo movimiento para que sepan quién manda en las aceras y en las zonas peatonales.
5. No aparquéis en la puerta de un edificio público, os pueden robar la bicicleta. Entrad directamente vestido de ciclista hasta el hall y dejadla allí. Esto es aplicable a cualquier edificio, universidades, basílicas, museos, conventos, ayuntamientos e incluso a comunidades de vecinos.
Pasadlo para que los ciclistas puedan recuperar su anterior esplendor.